Preludio
Llegará un momento en el que re-despertarás en
una caja oscura, mal oliente, húmeda y posiblemente a unos cuantos metros bajo
tierra. No te asustes, es tu ataúd, y este es el inicio de tu vida al revés.
Pero no estamos hablando de una vida como la
de Benjamin Button, en la que naces viejo y mueres joven, esta es distinta,
avisado estás.
Intenta desenterrarte como puedas, la gravedad
juega a tu favor, con un simple empujón echarás al espacio exterior toda la
tierra que te cubre y no te deja salir de tu punto de partida.
Quítate todos los ropajes que lleves y que te
cubren antes de que la gente te mire mal. No está bien visto ver personas vestidas:
esconden algo, no son de fiar, y el hecho de no ser todos iguales no crea
diferencias socio-culturales: nadie se ha gastado ni un duro más ni un duro
menos en la piel que lleva encima.
Estamos en pleno enero y la luna abrasa el
asfalto de las calles, por lo que agradecerás ir sin ropa.
Es hora de escoger con qué familia quieres
vivir. Da vueltas, observa, escucha, habla con toda aquella gente que te
parezca interesante vivir y elige aquellos con los que querrás desaprender todo
aquello que sabes.
Aquellos a los que hayas elegido les llamarás
hijos. Ellos serán los responsables de que olvides todo aquello que tienes
metido en la cabeza y hace que te preocupes y sufras demasiado por cosas que,
quizá, no puedas solucionar.
En tu nuevo hogar intenta dormir lo menos
posible para no cansarte y practicar tan poco deporte como te sea posible para
mantenerte con un aspecto saludable. Cuesta mucho no caer en la tentación de
hacer uno de los mayores placeres humanos, pero la salud es lo primero, seguro
que tus hijos te lo dirán más de una y dos veces. Te ayudarán a ir por el buen camino en toda tu
des-vida. Hazles caso, saben menos que tu.
Se lo más inútil que puedas tus primeros días
en tu nuevo hogar para dar buenas vibraciones a los que te rodean. Desordena,
ensucia, grita y pega: estas serán algunas de las mejores formas de mostrar a
los otros tal y como eres. No te asustes si intentan razonar contigo, un buen
golpe o un grito ensordecedor harán que las cosas vuelvan a la normalidad.
No será una vida difícil, nadie ha dicho que
lo sea, pero para esto está esta guía.
Plas, plas, plas! Bonissim. La presentació, digna d´un estilista de nivell. El poc que he llegit- ja tornaré- realment pràctic pel dia a dia. Sobretot perquè riure ajuda molt, a l'hora de viure. Te ríe??
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